La Unidad Militar de Emergencias (UME) ha cerrado el 2024 siendo un referente en la gestión de emergencias. El grupo ha consolidado su misión de proteger a la ciudadanía con actuaciones rápidas y coordinadas con el resto de los servicios de emergencias y administraciones competentes tanto en España como a nivel internacional. Entre sus intervenciones más destacables sobresale su participación en despliegues en el extranjero y catástrofes naturales.
El año pasado, la UME firmó nuevos hitos. Uno de ellos viene de la mano del desastre producido por las lluvias torrenciales en la Comunidad Valenciana. Allí, desde el 29 de octubre, realizó su despliegue más importante en una emergencia con la activación de 2.200 efectivos y 600 medios. En las primeras ocho horas de la desgracia ya se encontraba en la zona un millar de sus profesionales.
Desde la entidad señalan que esta operación ha sido un referente único en el ámbito de las emergencias nacionales. La propia UME coordinó a un total de 8.500 efectivos y 2.000 medios de las Fuerzas Armadas. Una de las hazañas más memorables para la unidad, y de la que se sienten enormemente orgullosos, es el rescate de más de 100 personas durante las primeras horas de la emergencia. Además, subrayan que esta operación continúa en marcha en 2025.
Otras intervenciones en la geografía nacional
Más allá de las labores desencadenadas tras la DANA, la UME ha participado en otras muchas operaciones a lo largo de todo el territorio nacional. En Aragón se realizó el seguimiento de las inundaciones del río Ebro con drones. Por otro lado, en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Valencia y Aragón contaron con su colaboración en extinción, trabajando junto a las administraciones locales.
Por otro lado, la UME ha sido activada por segunda vez para actuar en un incendio urbano. Fue en el conjunto residencial ubicado en el barrio de Campanar (Valencia) para apoyar las labores de los servicios de emergencias del 112 de la Comunidad Valenciana. A los efectivos desplegados del Tercer Batallón de Intervención en Emergencias (BIEM III), se incorporaron a la operación desde Madrid los vehículos VINTAC del Grupo de Intervención en Emergencias Tecnológicas y Medioambientales (GIETMA) y drones del Batallón de Transmisiones (BTUME). Del mimo modo, en el incendio forestal de Tárbena (Alicante) la UME desplegó a 226 militares que, apoyados con 69 medios, colaboraron con el resto de servicios de extinción.
Innovación e investigación
En octubre, la UME lideró un simulacro nuclear en Guadalajara para evaluar su capacidad ante emergencias radiactivas, utilizando drones y equipos de descontaminación. En cuanto a estos últimos, la unidad está muy involucrada en la asimilación y uso de nuevas tecnologías. Prueba de ello es la creación de la Unidad de Drones (UDRUME), presentando en su foro, proyectos avanzados como drones terrestres, acuáticos y aéreos teleoperados y sistemas de comunicación Starlink.
Presencia internacional
En Portugal, la unidad desempeñó su mayor despliegue internacional hasta el momento. Con un contingente de 364 militares y 116 vehículos se combatieron los graves incendios forestales que asolaban la zona. De esta forma y, por primera vez, se desplegó un puesto de mando táctico, bajo el mando del Jefe del Quinto Batallón de Intervención (BIEM V), en el extranjero para coordinar la asistencia. Sus esfuerzos incluyeron la creación de cortafuegos, extinción de focos secundarios y la realización de vuelos de reconocimiento con drones para detectar puntos calientes para contener un fuego que devastó 40.000 hectáreas. Además, la UME participó como parte del contingente que el Mecanismo Europeo de Protección Civil desplegó en los incendios forestales de Bulgaria, Madeira y Aveiro (Portugal).
Imagen: UME.