Los bomberos tendrían más posibilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares

Las partículas que emiten los incendios serían mucho más peligrosas que las que proceden de la construcción o los combustibles, generando un mayor número de cardiopatías.

El factor de riesgo ambiental más relevante para la mortalidad global son unas partículas de menos de 2,5 micrómetros de diámetro (PM2.5). Las partículas procedentes de los incendios podrían resultar mucho más tóxicas que otras emisiones como las de la construcción, provocando un mayor índice de enfermedades cardiovasculares. Una publicación de la revista científica JACC, recoge el trabajo de diez investigadores sobre este asunto.

El trabajo de los investigadores refleja que, por cada incremento de un microgramo por metro cúbico en la concentración de PM2.5 en el humo de los incendios forestales, durante un período de dos años, el riesgo de padecer insuficiencia cardíaca se incrementaba en un 1,4 %. Calculan que este nivel de exposición al humo podría estar vinculado a más de 20.000 casos adicionales de insuficiencia cardíaca anualmente en adultos mayores en Estados Unidos.

En esta investigación nacional, la exposición prolongada a las partículas generadas por el humo de incendios se vinculó con un aumento en el riesgo de insuficiencia cardiaca en comparación con el PM2.5 que no proviene de incendios, siendo las mujeres y las poblaciones socialmente vulnerables las más afectadas. Estos resultados, señalan los científicos, subrayan la importancia de implementar intervenciones y políticas dirigidas a disminuir la exposición al humo de incendios y sus efectos sobre la salud cardiovascular.

El cáncer, la principal causa de muerte entre los bomberos

Según datos de la Firefighter Cancer Support Network, un bombero tiene un 14 % más de probabilidades de fallecer de un cáncer que el resto de la población, llegando a ser su primera causa de muerte. Los estudios que se han realizado sobre el cáncer entre el cuerpo de bomberos apuntan que, respecto a la ciudadanía en general, tienen una probabilidad significativamente mayor de padecer la enfermedad y morir debido a esta por la exposición de sustancias tóxicas a las que se enfrentan en sus misiones, como gases o componentes químicos. Pese a que están equipados con materiales especiales para su protección, las partículas cancerígenas se fijan a su vestimenta, por lo que su piel estaría desprotegida al tener contacto con las prendas o herramientas contaminadas.

Imagen de archivo.

Servicios de Emergencia Brands

También te puede interesar