En 2023, el territorio sufrió 16 incidentes de este tipo, la cifra más positiva de la última década. Además, en cuanto a hectáreas quemadas, anotó los mejores datos desde hace cinco años.

Durante el 2023, Bizkaia registró 16 incendios forestales, el menor número de este tipo de incidentes en la última década. Además, el ejercicio pasado es en el que se han quemado menos hectáreas de superficie arbolada (2,23 hectáreas) en ese mismo período, a pesar de que ha sido el año más cálido desde que se tienen registros, con una media de 21,6ºC.

Los incendios forestales de 2023 arrasaron 33,31 hectáreas de terreno, el mejor registro desde 2018, año en el que ardieron 30,97 hectáreas en los 24 fuegos contabilizados. En cuanto a la superficie afectada el pasado ejercicio, el 93% (31,01 has) correspondieron a matorral.

La gran mayoría de los fuegos no alcanzaron la hectárea de afección, por lo que técnicamente se consideran conatos. Otros dos incendios alcanzaron entre una y cinco hectáreas de afección y tres más superaron las cinco hectáreas. Estos últimos sumaron 27,99 hectáreas de terreno quemado y se produjeron todos a lo largo del mes de marzo.

Estacionalidad y tendencia a la baja
El mes de marzo fue el segundo en número de incendios, ranking que lidera febrero con cuatro incendios. Los siguientes meses con mayor número de fuegos fueron abril y octubre, ambos con dos emergencias de este tipo de menos de una hectárea de afección, lo que confirma la estacionalidad habitual en el territorio, en el que los incendios forestales se registran mayoritariamente entre otoño y primavera, coincidiendo con la parada vegetativa.

El conjunto de los datos recopilados confirma también la tendencia a la baja en el número y dimensión de los incendios forestales que vienen afectando al territorio, tendencia que únicamente se ha roto en ejercicios en los que las condiciones meteorológicas extremas han producido fuegos de gran intensidad.

La Diputación Foral afirma que esa tendencia a la baja en número y afección de los incendios forestales es fruto de la estrategia que viene desarrollando para fomentar la sostenibilidad en la gestión y uso de las masas forestales de Bizkaia. Una estrategia que profundiza también en las labores de prevención de incendios y que ha permitido que el territorio sea durante los últimos años la zona de la Comunidad Autónoma Vasca con mayor superficie dotada de certificación forestal sostenible y, también, el territorio donde se están desarrollando mayor número de planes de este tipo.

Esta apuesta por la gestión forestal sostenible se materializa a través de medidas concretas incorporadas en los Planes de Ayudas al Medio Forestal, en los que se enmarcan las ayudas a las inversiones en la implementación de Planes Preventivos contra Incendios Forestales que eviten la existencia de zonas carentes de infraestructuras para la lucha contra los incendios y establezcan barreras naturales que impidan la expansión de los incendios forestales en zonas que se consideren de medio o alto riesgo.