El 16 de septiembre, la consellera balear de Salud, Manuela García, anunció que la isla de Ibiza contará con nuevas ambulancias del 061 para traslados de pacientes de alta complejidad o intervención rápida. El servicio recibirá también farmacias móviles y un vehículo para atender incidentes con múltiples víctimas. La recepción de nuevos vehículos llega después de varias reclamaciones en los últimos meses por los sindicatos sanitarios de las Islas Baleares, según ha informado el Diario de Ibiza.
Con un presupuesto de 56 millones de euros para los próximos cinco años, la flota está compuesta por 126 ambulancias para el transporte urgente y 120 para el programado en el conjunto de las islas.
La renovación de los vehículos, prevista para las próximas semanas, llega en un momento de creciente descontento entre los profesionales por los problemas técnicos que tiene la flota actual. Son ambulancias “que circulan desde marzo de 2018 y deberían haberse renovado en 2023”, ha explicado García. El mal estado de la flota se debe a “un contrato de renovación fallido”, acordado durante la anterior candidatura. Según la consellera, el contrato para el nuevo servicio sanitario tuvo que volver a salir a concurso público en 2024 y se adjudicó en marzo de este año.
Además, la consellera ha destacado que con el nuevo contrato habrá una ambulancia de reserva por cada dos, mientras en la anterior legislatura “nos dejaron una por cada siete”. Por su parte, Irantzu Fernández, diputada del Grupo Socialista, considera que el plan actual del Partido Popular es “desmantelar el servicio público de ambulancias con el objetivo de acabar privatizando el transporte no urgente».
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