La Comunidad de Madrid ha aprobado la adquisición de 1.800 uniformes de intervención para el Cuerpo de Bomberos tras dar luz verde a la compra de equipos de protección respiratoria de última generación.
Los nuevos uniformes de los efectivos madrileños son trajes del modelo U2, compuestos por chaquetones y cubrepantalones, y están dotados con la última tecnología para incrementar su seguridad en la atención directa de un siniestro.
La renovada indumentaria ofrece una mayor ventilación y protección térmica. Además, cuenta con un menor peso y es más ergonómica. Esto que posibilita un movimiento integral de los bomberos. Por otro lado, tendrán las certificaciones térmica y mecánica actualizadas, y responderán a la normativa de alta visibilidad para trabajos en la vía pública.
Entre sus características, destaca el cambio de color que pasa a ser rojo, frente al azul actual, para reducir el estrés térmico. Esta decisión responde al estudio técnico realizado desde la Jefatura de Unidad Técnica del Cuerpo de Bomberos de la Comunidad de Madrid sobre la potencial incidencia de la tonalidad en este factor.
Con esta compra, la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112 (ASEM112) llevará a cabo la renovación del vestuario de estos profesionales, cuyo suministro cuenta con un plazo de ejecución de 13 meses. Estos equipos de protección individual (EPI) son habituales en incendios urbanos e industriales, rescates en espacios confinados; intervenciones con riesgo nuclear, radiológico, biológico o químico; actuaciones en vía pública y trabajos que requieren recursos especiales.
Inversión en equipos de protección respiratoria
Como comentábamos al inicio de la publicación, los profesionales de la Comunidad de Madrid también recibirán nuevos equipos de protección respiratoria. Concretamente, 2.000 unidades nuevas que se adquirirán durante 2025, así como la impartición de formación para el correcto uso de estos nuevos dispositivos.
El objetivo es que todos los EPR del Cuerpo regional sean de última generación. Por ello, estas nuevas adquisiciones presentan una mayor ergonomía y están dotados de la más avanzada tecnología, aumentando la salvaguarda de estos profesionales durante las intervenciones que presentan ambientes nocivos y tóxicos.
Del mismo modo, protegen contra riesgos graves que puedan causar daños irreversibles. Además, permiten a estos profesionales intervenir en incendios en espacios confinados, localizar posibles víctimas y extinguir los focos activos, aportando aire respirable durante unos 30 minutos de media.
Imagen: Comunidad de Madrid.