El objetivo de esta formación, en la que han participado 12 bomberos de la Comunidad de Madrid, es practicar técnicas de conducción en condiciones y terrenos adversos, tan importantes a la hora de afrontar con éxito situaciones de emergencia. Al volante del Renault Midlum 240.14 4×4 CCF, vehículo específico para la extinción de incendios forestales (por su arco anticolapso interno en cabina, la protección ignífuga del cableado eléctrico, neumático y de las canalizaciones del gasóleo o por sus magníficas prestaciones dinámicas) y tras la evaluación del terreno, pudieron realizar las técnicas de avance en la subida o bajada de pendientes pronunciadas, conocer la dinámica del vehículo en función de la utilización de los bloqueos y optimizar su tracción a través del par o de la potencia, para así poder resolver con seguridad eventuales maniobras de avance y escapada.
La gama de vehículos de bomberos se ha enriquecido recientemente con la renovación de su cabina FPT, que, con 265 mm más de dimensión y 95 mm más de amplitud interior, ha ganado en confort. Además, la nueva disposición de la puerta trasera permite una mayor accesibilidad a la cabina. La seguridad se ha visto también incrementada con la integración óptima del sistema ERA (Equipo de Respiración Autónoma) y los nuevos revestimientos de aluminio, dotan al interior de una mayor resistencia y durabilidad. Una suma de mejoras que hacen de esta nueva cabina FPT una de las mejor preparadas del mercado para los trabajos específicos de la lucha contra incendios.
